"La Mofles"
Todo empezó cuando Karina, por casualidad, se enteró de un espeluznante trato de compra y venta en redes sociales. Una pequeña gatita negra, de ojos grandes y asustados, estaba a punto de ser sacrificada en un ritual de brujería. Sin pensarlo dos veces, Karina se movilizó para salvarla.
Con la ayuda de la veterinaria Patricia Ruth Canchola López (QEPD), Karina rescató a la gatita, a quien llamó La Mofles. Bajo el cuidado atento de Karina y la orientación invaluable de la doctora Canchola, La Mofles no solo sobrevivió, sino que floreció, demostrando una fortaleza y un cariño inquebrantables.
Este primer rescate despertó en Karina un profundo sentido de responsabilidad y amor por los gatos desamparados.
La conexión con La Mofles fue tan poderosa que marcó el inicio de una nueva misión de vida: brindar hogar, cuidados y amor a los gatitos que más lo necesitan.
Hoy, La Mofles sigue siendo la compañera fiel de Karina, quien ha dedicado su vida a la protección de los gatos callejeros y abandonados. En su hogar, conocido cariñosamente como La Kasa del Gatito Gordo, Karina convive diariamente con entre 30 y 40 gatos, brindándoles no solo un refugio, sino también una oportunidad para vivir y ser amados. Cada uno de esos gatitos lleva consigo una historia de lucha y supervivencia, y todos encuentran en Karina a su salvadora, tal como La Mofles lo hizo aquel primer día.